lunes, 19 de marzo de 2018

A TI, PAPA


Me gustaría poderte escribir en el Facebook como hoy hace todo el mundo. Felicitarte. Me gustaría que vieras por un huequito , las tres mujeres que dejaste en tierra ;)  cómo te echamos de menos y lo que es de nosotras.
Disfrutarías como uno más con la June y el Luc, y a mí, me hubieras venido a ver al teatro en un espectáculo propio. Verías que soy profesora (o así me denominan). No te creas que es algo increíble, porque ya lo debes ver, que trae mucho estruje de cabeza, la verdad, pero me gano la vida bien, haciendo algo que me gusta, intentando hacer soñar y reír, cosa que me encanta como a ti.
Verías que saludo a mucha gente y verías que ese carácter loco, lo dejaste en esta cabeza, aunque a veces me voy pareciendo a la Amparito y verías que, pues todavía no tengo un novio y supongo que es, porque quizá soy rebelde como me dijiste una vez, o espero alguien parecido a ti…o simplemente es así. La compañía nos gusta a todos, pero también me enseñasteis que "mejor solo que mal acompañado"y que no todo es "a cualquier precio".
Verías también que la Amparo y sus dos hijas son fuertes. 

Ahora sé que no fuiste perfecto, que eras bastante imperfecto. Como yo, quizá, o como la Judi, o como la mama, pero que lo hiciste bien, papa, de la mejor manera que supiste hacerlo. El recuerdo que me queda en el corazón es el de una buena persona. No el de un padre súper implicado en la familia, porque soy consciente de que toda la carga la llevaba la mama en relación a la crianza,  y porque soy consciente de que mi adolescencia en particular, no la gestionaste bien; pero sí siento el recuerdo de un hombre trabajador y honesto, que estaba orgulloso de sus niñas y de su mujer y el sentirme querida por una gran persona.

FELIZ DÍA PAPA . TE ECHO DE MENOS. TE QUIERO ; SIEMPRE.
ANA 19 DE MARZO DE 2018

lunes, 12 de marzo de 2018

LAS PALABRAS SON SENSIBLES



Ser sensible a las palabras tiene su parte buena y su parte mala. Como todo. Las palabras muchas veces no van acorde con la realidad o simplemente con la nuestra y es por eso que nos frustramos . Algunas veces , las palabras nos asustan y nos limitan, nos bloquean y nos paralizan. Otras, sin embargo, nos empoderan y consiguen cambiar nuestro patrón de pensamiento, nuestra actitud, nuestra manera de vivir, incluso. Tienen gran fortaleza.
Pero...¿Hasta qué punto debemos creernos las palabras?
Supongo que debemos creernos aquellas, que van acorde con movimientos , con gestos y con actitudes.

Se me ocurre comparar la unión de la palabra con la acción (en nuestra sociedad actual) , con la mística y la unión con la divinidad, es decir algo que solamente ocasionalmente ocurre (si miramos el reflejo de políticos y demás).

Si comparamos este proceso con la MÍSTICA, en la vía purgativa o asceta, el místico se desharía de todo aquello innecesario en relación a lo lingüístico y extralingÜístico, es decir, que empezaría a hacer uso únicamente de las palabras justas y de los gestos necesarios. En la vía iluminativa el místico intentaría gestar este proceso de "menos es más" , vivirlo y respirarlo para llegar a una coherencia entre palabra y acción. Por último ,en la vía unitiva se daría la convergencia entre palabra y acción , es decir se llegaría a la coherencia entre el alma y el pensamiento y a la unión con la divinidad. ;)

Pongamos atención a las palabras , pues van acompañadas de gestos.

Ana Adán . Marzo 2018