domingo, 12 de noviembre de 2023

MOLTES

Jo vull ser moltes,
I moltes vegades,
... I tantes vegades 
i amb moltes opcions!

- Una única opció m'ofega- 

Jo vull obrir portes,
i tancar moltes voltes,
(arrencar i cloure; arrencar i cloure; arrencar i cloure)
tancar i obrir portes,
de diferents colors.  

Jo vull ser moltes,
moltes formes i més voltes 
que no quedin resoltes 
com les voltes mortals.

Jo en vull fer moltes,
moltes revoltes 
ser una poca-solta 
i engegar sempre a pastar fang
-allò que no m'agrada, 
però de vegades, m'envolta-.

Jo vull fer tortes,
croquetes i tortes
croquetes i tortes 
croquetes i tortes...
Fins a quedar absolta,
extingir-me o dissolta. 

Què fortA!


Ana 

12 de novembre



sábado, 4 de noviembre de 2023

EL BURRUÑO

Acabo de intentar sacar los cascos de mi mochila. Eran un burruño.  No sé si existe esa palabra o forma parte de mi propio idiolecto (espero que esta última la esté utilizando también correctamente. Creo que sí). Pierdo unos segundos mirando la RAE. Burruño viene de gurruño, que a su vez, me lleva a gurruñar - arrugar o encoger algo. (La segunda no la voy a buscar. Esta vez me voy a dar una muestra de confianza a mí misma: "Good job, Ana"

Por lo tanto, sí. Mis cascos eran un burruño, como decía, y cada día que los saco, repito la misma acción. Saco los cascos de la mochila y pierdo, mínimo 5 minutos, en deshacer los cables de los auriculares. Y, si empiezo a escribir en el móvil, pierdo cinco minutos más - como poco- para asegurarme de que las palabras que utilizo son las adecuadas. 

Lo primero que he pensado cuando intentaba deshacer el nudo de los auriculares, es que me gustaría que alguien inventara un "deshacedor de líos de cable - bien, o de lo que sea, claro" para que rápidamente pudiera empezar a conectar el audio que yo quisiera - o pudiera conectar, simplemente conmigo misma (¡Ja, ja, ja!). 
Luego he pensado,""llámate autodestructiva (o no)" pero quizá la culpa es tuya Ana Adán", y mi cerebro me ha imaginado sola, bajando unas escaleras de la entrada de una gran catedral, medio desnuda, en la Edad Media, mientras el populacho me hacía un corrillo y sus voces vitoreaban: ¡CULPABLE, CULPABLE, CULPABLE!, y me escupían y me tiraban restos de comida, maltratándome como se hacía con los animales - Ya sé que en la serie se utilizaba la palabra VERGÜENZA, mientras Cersei baja por las escaleras totalmente desnuda, pero supongo que, mi mente, con verme semidesnuda y sucia, ya ha tenido bastante por esta vez. 
Porque yo sé que la responsabilidad de encontrarse el "gurruño" o no encontrárselo, depende de mi paciencia o de mi momento cuando los guardo.

Me veo venir. Ahora seguramente voy a poner la excusa de la prisa de cuando llego a algún lugar. De que llevo mochila, y de que guardar y sacar objetos, a veces es incómodo, porque tengo que girar la mochila, abrir la cremallera, sacar o guardar el utensilio que sea, cerrar la cremallera y colocarme bien la mochila en la espalda, habiéndome antes asegurado de que todo va bien cerrado para que, nadie por detrás me abra la mochila y meta su manita...
Poca broma, con todo el proceso. Ahora pienso que ¿por qué no inventarán algún objeto, que te puedas adaptar a tu cuerpo como mochila delantera, sin que se marque mi barriga? ¿No hay tantos supuestos avances con la inteligencia artificial? ¿Pues por qué todavía no existe el deshacedor de "burruños o líos de cables" o el creador del adaptador corporal mochilero? ... A veces no entiendo nada, de verdad. 

Hoy me ha dado tiempo de deshacer el nudo y utilizar los auriculares cinco minutos durante el trayecto. Viendo la velocidad de mi mente y la cantidad de acciones que voy realizando o pretendo realizar, no me extraña. ¿Alguna es eficiente?- me pregunto. Probablemente, la más eficiente haya sido la de deshacer el lío de los cables.
He llegado a mi parada y una vez salgo del metro, la verdad es que me es incómodo ir con el móvil, los auriculares y a paso rápido. (Lo del paso rápido, no sé por qué lo hago, ya que suelo llegar con tiempo a los sitios).
Así que, me he quitado los auriculares, mientras caminaba, he hecho de nuevo un burruño y los he metido en el bolsillo pequeño de la mochila, situándome previamente la mochila en mi barriga, abriendo el bolsillo, guardando los auriculares, cerrando la cremallera y colocándome de nuevo la mochila en la espalda. 

He pensado lo fácil que es hacer un burruño  y la pérdida de tiempo que es querer deshacerlo. He pensado la cantidad de veces que hago un burruño y la cantidad de veces que lo deshago, perdiendo cinco minutos o más de mi vida, cada momento que esto ocurre. 

He pensado en lo poco que costaría eliminar esa palabra del diccionario, si yo (la primera, sí, lo reconozco) y unos cuantos más, nos dedicáramos a, con un poquito de paciencia, guardar los cables de los cascos de manera ordenada, es decir, haciendo un pequeño ovillo, cada vez que los guardamos, para que después, cuando los sacáramos, simplemente tuviéramos que tirar de uno de los dos cables que fluiría y seguiría un camino amable, que permitiría una apertura fácil a los auriculares y evitaría una gran pérdida de tiempo, que al final es parte de la vida (poca broma).

Es verdad que los "gurruños, líos o burruños" siempre se crean con una facilidad y una rapidez increíble. Siempre se suele salir airoso de los burruños, pero el tiempo que se tarda en salir de ellos, no sé si vale la pena. 





¡Feliz fin de semana!
Ana  3-11-23